sábado, 16 de mayo de 2015

Relaciones tróficas.

Formada por el conjunto de seres que van alimentándose sucesivamente unos de otros:
los vegetales, herbívoros y carnívoros son los eslabones de la cadena trófica.
un ejemplo son los organismos que viven dentro de otros:
Las interacciones más intensas entre organismos se dan en el parasitismo y la simbiosis. El hospedador es mucho mayor que el parásito o simbionte,
que la mayoría de las veces son microorganismos, y constituye su medio ambiente.

Los parásitos obtienen energía del hospedador, pero no lo matan, lo debilitan. La mayoría de los animales viven cargados de parásitos y entre
unos y otros se han desarrollado ciertas adaptaciones mutuas, de manera que su interacción tiende a un equilibrio en el que no se
produce la extinción de ninguno de ellos.

Cuanto más antiguo en el tiempo es este sistema parásito-hospedador, menos síntomas perjudiciales presenta este último y esta interrelación
puede llegar a evolucionar hasta un comensalismo o hasta una simbiosis. En algunas ocasiones el hospedador no solo no presenta
ningún daño aparente, sino que es precisamente el parásito quien lo sufre.


 
Para realizar sus funciones vitales, los seres vivos necesitan un aporte constante de materia y de energía. Toda la energía que utilizan los seres vivos de los ecosistemas proviene del sol.
Las plantas obtienen la energía directamente del Sol por medio de la fotosíntesis. Los animales obtienen la energía a partir del alimento que ingieren, sea vegetal o animal. Mediante la respiración, tanto las plantas como los animales aprovechan la energía, pero disipan parte de ella en forma de calor, que pasa al medio externo. Por tanto, el flujo de energía que atraviesa un ecosistema es unidireccional.
Algunos microorganismos transforman la materia orgánica muerta en sales minerales. Las sales son aprovechadas por los organismos autótrofos, y los organismos autótrofos son ingeridos por los heterótrofos. Después, tanto los organismos autótrofos como los heterótrofos mueren y sus restos son transformados por los microorganismos, comenzando de nuevo el ciclo. Así, pues, la materia circula en el ecosistema de manera cíclica.


                        

No hay comentarios.:

Publicar un comentario